Situaciones y variables en la situación de enseñanza de las lenguas extranjeras: contextos de adquisición y uso, repertorio lingüístico, la lengua extranjera a edades precoces

¡¡Hola a tod@s!!

La de hoy es la última entrada de la asignatura de Didáctica de la Enseñanza de las Lenguas Extranjeras y, ahora definitivamente, la última entrada de este blog. En esta ocasión, me dedicaré a comentar tres actividades correspondientes al tema uno – impartido por Gonzalo Constenla – que me despertaron gran curiosidad al no haber trabajado previamente con ellas.

La primera de estas actividades de las que os quiero hablar consiste en el conocido como diagrama de Venn, que llevamos a cabo en grupos de cuatro personas. Este descubrimiento artístico nos sirve para ilustrar de forma gráfica las diferencias y/o similitudes entre dos o más conceptos, ideas, o objetos, entre otras. Además, estos diagramas pueden ser de tres tipos diferentes: circle within a circle, separate circles, y overlapping circles (la imagen de la derecha). Este último, conformado por tres círculos superpuestos, es precisamente con el que trabajamos en el aula. Nuestro objetivo principal consistía en establecer las diferencias (en los extremos) y las similitudes (en el centro) entre el proceso de enseñanza-aprendizaje de la lengua materna y de la lengua extranjera. Tras unos minutos de reflexión grupal, hicimos una puesta en común entre todo el grupo-aula que derivó en una serie de conclusiones, de las que destacaré las principales. En primer lugar, podemos decir que la lengua materna, también conocida como lengua inicial o primera lengua, es aquella que se aprende en un contexto familiar de manera inconsciente y que somos capaces de utilizar, sin miedo a cometer errores, de manera formal e informal. Por otra parte, la lengua extranjera es aquella que se aprende de manera consciente – ya sea en el colegio, en una academia o de forma autónoma, entre otras – a través de contextos generalmente artificiales y demasiado formales que a menudo generan inseguridad a la hora de comunicarse en contextos reales. Como valoración, cabe decir que esta actividad es tanto interesante como efectiva, pues se le ofrece al alumnado una forma visual de asimilar y acomodar nuevos aprendizajes de una forma clara y sencilla.

Otra de las actividades que llevamos a cabo en la primera sesión se conoce como Placemat - os dejo aquí un enlace con actividades similares que os pueden ser de interés. Al igual que en el caso anterior, desconocía la existencia de esta herramienta, pero resultó ser todo un descubrimiento. En este caso, Gonzalo nos proporcionó un folio a cada grupo de cuatro (el mismo grupo que el anterior), que debíamos dividir en cinco partes distintas, como podéis ver en la imagen. Esta estructura resulta ser muy práctica, pues cada integrante del grupo puede expresar su opinión individual para luego escribir en el centro de la hoja una respuesta colectiva consensuada. Explicado esto, cada grupo se dispuso a responder dos preguntas de una lista proporcionada por Gonzalo que abarcaban el uso de las lenguas en diferentes contextos. Concretamente, en nuestro grupo nos tocó responder a las siguientes cuestiones: En la Unión Europea se hablan más de 40 lenguas distintas. ¿Se hablan todas en el parlamento?; Pedro es de A Coruña y trabaja en la tienda Zara de Marineda City. Aprendió a hablar en castellano. ¿Qué lengua hablará con un cliente que le hable en gallego? ¿Y con un cliente que le hable inglés? En cuanto a la primera pregunta, fue fácil llegar a un consenso ya que consideramos que no todas las lenguas se hablan en el parlamento, especialmente teniendo en cuenta que hay países en los que se habla  más de una lengua, como es el caso de España. En la segunda cuestión, sin embargo, nos fue más difícil llegar a una puesta en común. Con todo, decidimos que lo más probable sería que Pedro le hablase al cliente gallego-hablante en castellano, dada la proximidad que ambas lenguas comparten y que facilitan el entendimiento mutuo; pero que intentase comunicarse con el cliente inglés a través de dicho idioma, especialmente si su dominio del mismo es alto, para intentar llegar a una comunicación efectiva que no se puede llevar a cabo por medio de, en este caso, el castellano.

La última actividad de la que os quiero hablar consiste en la realización de un repertorio lingüístico propio. Primero de todo, cabe decir que un repertorio lingüístico, también conocido como repertorio verbal, es aquel que responde a un conjunto de elementos lingüísticos que un hablante o comunidad de hablantes domina. En este conjunto entrarían pues los fonemas, palabras, variantes (o registros) y variedades lingüísticas (o dialectos), entre otras, de una lengua. Dicho esto, cabe decir que cuanto más rico sea nuestro repertorio lingüístico, mayor será nuestro desarrollo plurilingüe. De esta actividad me gustaría resaltar su carácter motivador, pues muchas veces ignoramos que el conocimiento que tenemos en otras lenguas, sea mayor o menor, nos enriquece lingüísticamente y nos ayuda a aprender, comprender y comunicar en otra lengua. Con esto en mente, os dejo aquí el enlace al repertorio lingüístico que realizamos en el grupo 1 por medio de Drive, y a través del cual se pueden comprobar las lenguas y variedades lingüísticas que empleamos, bien sea de forma activa o pasiva.

A modo de conclusión, dado que esta es la última entrada de blog, agradezco que esta asignatura se haya centrado en los aspectos prácticos del proceso de enseñanza-aprendizaje que todos llevábamos esperando conocer desde el inicio del Máster, si bien considero que no se debería esperar tantos meses para entrar en contacto con este tipo de material práctico. Por otra parte, me alegra ver como a lo largo de todo este tiempo todos y todas nos hemos mostrado entusiastas por desarrollar un proceso de enseñanza-aprendizaje en el que el alumnado se divierta y se motive al tiempo que aprenda. Aprovecho también para desearos mucha suerte en vuestras prácticas y en vuestra experiencia como docentes, que espero que sea emocionante y gratificante. Esto ha sido todo, ¡hasta otra!

Comentarios

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Hola, Raquel. Como siempre, disfruto mucho leyendo tus publicaciones.
    En primer lugar, me entristece coincidir contigo en que la mayoría de contenidos que circulan por el aula de lengua extranjera siguen siendo artificiales, de hecho, yo misma he sufrido este proceso y sus consecuencias. Y, como bien afirmas, las terribles consecuencias de esta forma de enseñar y aprender la lengua se manifiestan cuando el alumnado se encuentra en un contexto real en el que tienen que interactuar con el entorno.
    En cuanto a las herramientas empleadas en las actividades, también considero que el diagrama de Venn puede ser de gran utilidad para asentar conocimientos y a su vez relacionarlos, fomentado así el aprendizaje significativo.
    Por otro lado, el placemat es igualmente una herramienta útil, ya que permite al alumnado hacer anotaciones sobre su opinión personal antes de plasmar las ideas consensuadas en el espacio central. Además, con el placemat podemos observar cuánto han cambiado las ideas de cada estudiante antes de realizar la puesta en común.
    He disfrutado mucho con tu publicación. Espero que, a pesar de haber finalizado las sesiones de esta asignatura, podamos seguir sabiendo de ti y tus experiencias como docente en el futuro.

    ResponderEliminar
  3. ¡Hola, Raquel!

    Felicidades por tu entrada, en la cual creo que haces una muy buena descripción de las actividades que llevamos a cabo en la sesión de este tema. Yo sí que conocía los diagramas de Venn, pero siempre los había utilizado dentro de contextos matemáticos o científicos, gracias al ejercicio propuesto por Gonzalo es fácil reconocer su utilidad a la hora de aplicarlo al aprendizaje de las lenguas, ya que ofrece una ayuda visual que puede ser de gran aprovechamiento para el alumnado. En cuanto a la actividad de Placemat, al tratarse de una técnica que desconocía, me sorprendió por la sencillez de su elaboración y la eficacia que ofrece a la hora de hacer una puesta en común de las distintas respuestas ofrecidas por los miembros de los equipos.

    La conclusión a la que llego tras haber realizado estas actividades, es que no es necesario recurrir a la nuevas tecnologías ni a técnicas innovadoras para poder ofrecer a nuestro alumnado opciones más creativas cuando queremos reforzar su conocimiento o ayudarles durante el proceso de enseñanza-aprendizaje, un simple trozo de papel es una herramienta suficientemente válida para hacer uso de una metodología comunicativa, cooperativa y enfocada a la acción.

    ¡Un saludo!

    ResponderEliminar
  4. ¡Hola, Raquel!

    Al igual que tú, desconocía las herramientas que utilizamos en estas sesiones para tratar ciertos aspectos de las lenguas o formas de debate. Tanto los diagramas de Venn como el placemat me parecieron muy interesantes; en un futuro, creo que utilizaría el diagrama de Venn como apoyo visual para explicar algo, mientras que usaría el placemat para fomentar el debate en grupos reducidos de personas y posteriormente un debate conjunto a nivel grupal. Me parece una excelente manera de reflexionar sobre las creencias propias, defenderlas y tratar de llegar a un acuerdo común.

    El repertorio lingüístico también me pareció muy interesante, sobre todo para ser conscientes de lo relacionadas que están las lenguas entre sí (y más si hablamos de las lenguas románicas). Este tipo de actividades te ayuda a comprender y reflexionar sobre la importancia de conocer idiomas, ya que esto no te acercará solo a la lengua y cultura de un pueblo, sino a varios (al menos en muchos casos).

    Enhorabuena por tu entrada y buena suerte en el período de prácticas!
    Un saludo,
    Antía

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

La evaluación en el aula de lenguas extranjeras: evaluación inicial, formativa y final; uso de descriptores (rúbricas)